martes, 4 de diciembre de 2012

CONVOCATORIA PARA JUEVES 6-12-12

A LA COMUNIDAD EDUCATIVA :



En la reunión del día de hoy entre el rector del CNBA Gustavo Zorzoli y los docentes consejeros electos al CER por la lista UNIDAD, fue rechazada nuestra propuesta de que se retrotraiga la medida disciplinaria tomada desde la rectoría a fin de encauzar la problemática planteada a través de los ámbitos institucionales que sí contemplan la participación de todos los miembros de la comunidad educativa del Colegio Nacional de Buenos Aires.


Consideramos que una situación de crisis institucional como la que se ha provocado, requiere una respuesta pedagógica, creativa y participativa.


Por este motivo convocamos a una reunión del CER (Consejo de Escuela Resolutivo) con los integrantes de todos los claustros, los salientes y los entrantes recientemente electos, para el día jueves 6 de diciembre a las 17:00 hs en la sala de profesores del CNBA.


“Colectivo Docente” “Agrupación Raúl Aragón”

Lista 1 “UNIDAD”

lunes, 3 de diciembre de 2012

FRENTE A LAS SANCIONES


Declaración de la lista UNIDAD



Frente a las decisiones autoritarias del Rector del CNBA


Los docentes de la lista UNIDAD expresamos nuestro más enérgico rechazo a las medidas adoptadas por las autoridades del CNBA desde el jueves último, en particular a la sanción de los alumnos del turno tarde, tanto por el contenido de la medida -pues se dejó libres a todos los alumnos que habían dado el presente como correspondía y no podían presentar pruebas irrefutables de no haber participado, invirtiendo ilegítimamente la carga de la prueba-, como por la forma en que fue decidida y aplicada -pues no se trató en los órganos colegiados existentes, se ignoró arbitrariamente casi la totalidad de los descargos escritos por los alumnos y se abandonó y luego se cerró con irresponsabilidad la institución, ante la inminencia del justificado pedido de explicaciones de padres, alumnos y docentes-.


Rechazamos la política pedagógica y comunicacional del rector Gustavo Zorzoli, que impidió el normal cierre de todos los cursos, produjo una injustificada angustia en decenas de alumnos y sus familias que deberían en cambio estar festejando el logro del cierre de largos años de estudio y trabajo, y por ende también provoca una profunda inquietud en toda la comunidad educativa del CNBA.


También advertimos que, desde el lugar que nos ha sido reconocido por los colegas en el CER, no toleraremos políticas torpes o malintencionadas que terminan colocando a muchos de nuestros alumnos en una situación de maltrato y a la institución ante los medios de comunicación masivos bajo una luz que no se corresponde en absoluto con la realidad de nuestro colegio y que sólo lo perjudica.

“Colectivo Docente” “Agrupación Raúl Aragón”

Lista 1 “UNIDAD”

jueves, 4 de octubre de 2012

Boletín de SITUBA.

http://www.calameo.com/read/000842691d70413a713dc

Te invitamos a leer un modesto balance de este nuevo espacio sindical  que aspira la democratización de trabajadores de  la UBA.

martes, 14 de agosto de 2012

La AGN abrió una invesigación por Zbar



11.08.2012

el grupo 23 lo denunciará ante la justicia



La AGN abrió una invesigación por Zbar

Buscan determinar si el auditor Horacio Pernasetti incurrió en alguna irregularidad al designarlo como asesor y si hay incompatibilidad con su cargo en el Nacional Buenos Aires.

Por:

Tiempo Argentino


La Auditoría General de la Nación (AGN) inició una investigación interna para determinar si la designación de Agustín Zbar como asesor del auditor Horacio Pernasetti implica alguna irregularidad. Zbar se desempeña además como vicerrector del Colegio Nacional de Buenos Aires lo que sería incompatible con su cargo de asesor en la AGN. Pernasetti es el responsable de firmar la carga horaria de Zbar, quien reconoció en diálogo con Tiempo Argentino que su recibo de sueldo figura en el escalafón A4, por el que percibe un salario que ronda los 30 mil pesos.

Una fuente cercana al titular de la AGN, Leandro Despouy, afirmó el jueves que el organismo de control no estaba al tanto de la doble contratación de Zbar, y expresó su rechazo a esa situación. La misma fuente relató que Zbar había sido desplazado de su cargo de gerente de Legales, debido a "irregularidades con un expediente" que habría sido cajoneado.

En ese contexto, Zbar hizo referencia en un correo electrónico a una presunta campaña de difamación orquestada por el periodista Eduardo Feinmann "con la colaboración de Tiempo Argentino".

Por ese motivo, los abogados del Grupo 23 iniciarán el lunes una demanda contra Zbar por haber calificado de "campaña" una información periodística ya que esa actitud atenta contra la libertad de expresión.

Zbar es empleado de la planta permanente de la Auditoría General de la Nación y, a la vez, se desempeña como vicerrector del turno tarde del Colegio Nacional de Buenos Aires. Ambos cargos son incompatibles según el Estatuto del Personal de la Auditoría General de la Nación, en su artículo 19 y el artículo II del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires, desarrollado en el artículo I del Anexo I de la Resolución 5909/2009.

Zbar fue nombrado vicerrector en el Nacional Buenos Aires el 9 de febrero de 2011. Sin embargo, está de licencia desde que protagonizó un incidente con los alumnos durante la última toma, el 11 de julio. El vicerrector fue acusado de golpear a dos alumnos con un banco al intentar entrar a su despacho y de zamarrear y empujar a una alumna de quinto año por lo que algunos padres de alumnos evalúan hacer una denuncia penal, aunque Zbar lo desmiente. «

martes, 7 de agosto de 2012

CARTA ABIERTA DOCENTES CNBA



CARTA ABIERTA

a la comunidad educativa del CNBA

Las razones que nos impulsan a escribir esta Carta Abierta están vinculadas, como en las anteriores ocasiones, al derecho que nos asiste de opinar libremente como parte de la Comunidad Educativa del CNBA y al compromiso que sentimos de hacer público nuestro posicionamiento.

Los días 11, 12 y 13 de julio, los estudiantes llevaron adelante una toma del Colegio con un pliego de reivindicaciones que incluía el reclamo de un comedor institucional y la solidaridad con un trabajador no docente del colegio. La medida adoptada por los estudiantes -acertada o no-, posee la legitimidad que le confiere el haber sido fruto de una discusión democrática en el marco de una Asamblea estudiantil, situación subrayada y celebrada por el Ministro de Educación de la Nación, en declaraciones de la semana pasada, como un ejercicio saludable de aprendizaje democrático.

Más allá de acuerdos o desacuerdos con el tipo de medida, entendemos que la reacción estudiantil es sólo el síntoma de un malestar que subyace en la comunidad educativa, originado -como ya expresamos en nuestra carta del 18 de abril de 2011- en la concepción verticalista y la falta de voluntad de las autoridades para evitar el agravamiento de problemas que hace meses venían preanunciándose, y que no supieron o no quisieron resolver a través de los canales genuinos de participación. Canales que –aun cuando en apariencia funcionen- son manipulados de diversas formas desde la rectoría, como ocurre –para poner solo un ejemplo- con las asambleas estudiantiles, cuya realización se coarta, dificultando los debates y las deliberaciones conducentes al arribo de las mejores decisiones en las votaciones.

Esta modalidad de control instituida por las autoridades encuentra su réplica en la forma de relación elegida con el claustro docente, conforme a la cual se ha abandonado el diálogo institucional para sustituirlo por una catarata de comunicados –no otra cosa son las “cartas” enviadas desde la rectoría, en las que se informa acerca de actos consumados o por consumarse, decididos unilateralmente-, que ubican al cuerpo docente en un lugar de receptor pasivo que asiste, día a día, al avasallamiento de su derecho de opinar y ser escuchado. El comunicado oficial del colegio que recibimos los docentes el miércoles 11 de julio, según el cual las clases continuaban normalmente, es un buen ejemplo de esta voluntad de controlar, negando incluso la realidad: quienes concurrimos al colegio ese miércoles, primer día de la toma, nos encontramos con una realidad totalmente distinta respecto de la “normalidad” informada por las autoridades.

El proceso de democratización abierto por el Acta de Compromiso de junio de 2007 (uno de cuyos garantes fue el hoy Rector, Gustavo Zorzoli) y la dinámica de intercambio, debates y consensos entre los claustros y el Rectorado, que el acta garantizaba, han sido sistemáticamente frenados.



Por ello, consideramos que la medida llevada a cabo por los estudiantes y sus justificaciones (el rechazo a una concesión comercial privada dentro de un espacio público y el pedido relativo a la situación jubilatoria del no docente Guido Martínez Cornejo) son el emergente de ese malestar más profundo, derivado del autoritarismo encubierto que impera en el colegio, donde los mecanismos de toma de decisiones que atañen a la totalidad de la comunidad educativa son “democráticos” solo en el plano formal, pero no en el real. Circunscribir una decisión tan radical como una toma a los dos motivos antes señalados sería caer en una simplificación que nos desvía del correcto diagnóstico del estado de situación institucional.

La actuación de las autoridades frente a los reclamos explícitos que motivaron la toma ilustra claramente su manera unidireccional de resolver los conflictos surgidos en la comunidad educativa. En el primer caso, a través de la creación de una “Comisión de Seguimiento del comedor y los quioscos”, que no respondía a la verdadera discusión propuesta por los alumnos, relativa a la justificación de un emprendimiento comercial privado (por tanto, con fines de lucro) en el seno de una institución pública.

Esto significa que el Rector rehusó el debate del planteo estudiantil -la existencia de una concesión privada- e impuso como tema la regulación y el control de una concesión por parte de aquella comisión. Por tal motivo, no es justa la acusación que formula en sus “cartas”, en las que les atribuye a los alumnos un espíritu poco democrático y los responsabiliza del fracaso de la reunión.

En relación con el Sr. Guido Martínez Cornejo –cuya situación de precariedad laboral fue incluida de modo sostenido en los reclamos estudiantiles a lo largo de este año-, el Rector, en su “carta” del 11 de julio, prometió brindarle una asistencia temporaria, aclarando que tal medida excedía aquello a lo que el Colegio estaba legalmente obligado. Creemos que es esta preeminencia del discurso legal lo que marca una diferencia con las expectativas de los alumnos, quienes solicitaban un tipo de respuesta desde un plano más humano que el meramente legal.

Creemos que la actitud del Rector ante la toma no es la que corresponde al directivo de un ámbito escolar, ya que la resolución del conflicto debería transitar por cauces menos agresivos. Consideramos equivocada la opción de confrontar con los alumnos, como si estos fueran contrincantes en pie de igualdad, “adversarios” de los adultos. El Rector hizo una demostración de fuerza, con comunicados de distintos organismos que rápidamente encontraron un lugar en la página del colegio; por el contrario, allí no fueron incluidos los comunicados del CENBA ni de la Asociación de Graduados (ambos con representación en el CER), que sostienen posiciones críticas y disidentes con la gestión de las actuales autoridades.

El comunicado de la Mesa Directiva del CENBA muestra con claridad la falta de entendimiento y de diálogo: en él se denuncia que algunos alumnos fueron agredidos física y verbalmente por el vicerrector Agustín Zbar. Frente a estos preocupantes hechos, lamentamos que, una vez más, nuestra institución sea escenario del maltrato de un docente a un alumno. Repudiamos toda forma de violencia -inadmisible en un establecimiento educativo-, que intensifica el clima de confrontación y se aleja de una posición dialoguista y abierta. Nos solidarizamos con quienes fueron agredidos en estos episodios y con todos aquellos que, de una forma u otra, son víctimas de agresiones, persecuciones e intimidaciones en la institución.

Párrafo aparte merece la actuación de la Comisión Directiva de la Asociación Docente del CNBA, cuyo comunicado “Tristeza y compromiso”, del 13-07-12, difundido por el Rector del CNBA desde su dirección de mail (y que insólitamente no figura al día de la fecha, 30 de julio, en la propia página web de dicha Asociación, http://docentescnba.wordpress.com), evidencia una posición sumamente hostil hacia los alumnos. Queremos manifestar que, como docentes de la institución, no nos sentimos representados por las expresiones vertidas en el mismo, ya que el claustro docente no ha sido invitado a participar en ninguna asamblea o debate para decidir qué posición tomar al respecto. Por tanto, lo allí declarado corre por exclusiva cuenta de una saliente CD, muy alejada de su original posicionamiento crítico hacia la gestión del profesor Gustavo Zorzoli. Es notable el contraste entre la profusa publicación de comunicados propios, resoluciones de asambleas y testimonios de docentes, en el período comprendido entre noviembre de 2010 y marzo de 2011 -la mayoría de ellos críticos a la candidatura, explícitamente rechazada por la CD de la Asociación, designación y primeros momentos de la gestión del actual Rector del CNBA-, y el prolongado silencio mantenido desde entonces por la CD. Durante la actual gestión se han llevado a cabo algunas de las medidas que la CD otrora denunciara, junto a los gremios que participan en el CNBA, como posibles amenazas, tales como el progresivo desmantelamiento del turno vespertino o despidos encubiertos de docentes con argumentos de finalización de contratos o por problemas de horarios derivados de cambios inconsultos de ordenamiento de materias, por mencionar sólo algunos de los hechos ocurridos en este último tiempo. Sin embargo, la CD no defendió los derechos de los docentes ni tampoco alzó su voz frente a otros graves hechos, como la escandalosa intervención por parte del Vicerrector y Jefe del Departamento de Derecho, profesor Zbar, en el Departamento de Historia, violentando el elemental derecho de los docentes de dicho departamento de tener como Jefa a la colega que ellos ya habían elegido democráticamente a través del voto.

Efectivamente, una gran cantidad de decisiones han sido tomadas de forma inconsulta, dejando fuera a los distintos sectores de representación de la institución. Es necesario retomar el camino del diálogo y del consenso, en el que la voz y las propuestas de todos los Claustros realmente sean tenidas en cuenta, en un ámbito en el cual haya verdaderas discusiones y debates que permitan arribar en conjunto a la mejor solución a los problemas existentes en el CNBA. Ahora, si el objetivo de las autoridades es “controlarlo todo” –una lógica que no convalidamos-, lejos estaremos de resolver de manera democrática los conflictos que surgen en la convivencia. Por eso, los docentes que formamos parte de este Colectivo exigimos que se respeten las opiniones discrepantes y, con todas nuestras limitaciones, persistimos en nuestro compromiso de trabajar por el mejor desarrollo posible del proceso de democratización, que iniciamos junto a la Comunidad Educativa en el año 2007.

Colectivo Docente


Buenos Aires, 30 de Julio de 2012

Colegio Nacional de Buenos Aires